La demencia senil o “mal de Alzheimer” es una enfermedad que crece diariamente. Las estadísticas estiman que afectará a 106 millones de personas en el 2050. Se considera que contraerá la enfermedad el 10% de las personas que rondan los 65 años, el 25% de quienes han cumplido 75 y el 50% de los de 85 años y más.
Tal vez desconozcas que una gran parte de la comunidad médica llama a la enfermedad de Alzheimer: “Diabetes Tipo 3”. ¿Por qué? Las investigaciones han demostrado que la resistencia a la insulina y la tendencia a la obesidad características de la diabetes constituyen factores desencadenantes del daño cerebral que nos roba la memoria.
Este panorama amenazador nos invita a considerar lo siguiente:
- El consumo excesivo de azúcar y grasas trans-artificiales, favorece la inflamación del organismo y conduce al rechazo de la insulina y al riesgo de contraer Alzheimer. Huye de la comida rápida frita y los alimentos procesados que contienen aceite vegetal parcialmente hidrogenado
- La inflamación y el desequilibrio de la insulina conducen al aumento de peso, lo que lleva a más inflamación.
- Y esta inflamación sistémica finalmente afecta el cerebro.
¿Se puede revertir o prevenir la enfermedad de Alzheimer y la demencia? ¡Sí! Con la ayuda de tu médico primario, comienza por buscar las causas de tu pérdida de memoria. Las más probables son:
- Diabetes mal controlada, prediabetes o síndrome metabólico y obesidad.
- Baja función tiroidea
- Depresión
- Insuficiencia de complejo B, especialmente de la vitamina B12
- Deficiencia de Omega-3
- Mercurio u otra toxicidad de metales pesados
- Deficiencia de vitamina D
- Colesterol alto
Una vez identificadas las causas del desequilibrio, hay algunas medidas que ayudan a mantener la agudeza mental. Vitanovas evaluará tu caso con un criterio médico antes de que decidas incorporar esas medidas a tu rutina diaria. Nuestro paquete de sueroterapia “The Shield”, además de reforzar el sistema inmunitario, aplica una terapia regenerativa con exosomas de células madre humanas pluripotentes, las cuales reducirán la inflamación y el estrés celular. Incluye también altas dosis de antioxidantes, vitaminas e ingredientes básicos como el glutatión y el zinc.
Nuestro plan de seguimiento incluirá recomendaciones personalizadas para tu dieta y hábitos de vida. Las acciones que debes adoptar para atenuar el deterioro cognitivo son:
- Equilibrar el nivel de azúcar en sangre con alimentos integrales, proteínas magras y grasas saludables.
- Seguir la dieta mediterránea o MINO, aceites MCT (aceite de coco), té verde y cúrcuma.
- Ingerir vitaminas y minerales a través de elementos naturales, bayas, frutos secos y vegetales a los suplementos en cápsulas. No obstante, ciertos preparados farmacológicos son recomendables, como el Omega 3, Ginkgo Bilova y otros ingredientes siempre previa consulta al médico primario.
- Hacer ejercicio físico y mental. Caminar 20-30 minutos al menos 3 veces a la semana es algo esencial. También es recomendable la práctica de la meditación, los ejercicios de relajación, el yoga, el tai chi, así como los ejercicios y juegos de agudeza mental.
- Tratar los trastornos de la tiroides y la baja en hormonas sexuales.